Oseas

Venid y volvamos a Jehová; porque él arrebató, y nos curará; hirió, y nos vendará.

Salmos

¿Por qué han de decir las gentes: ¿Dónde está ahora su Dios? Nuestro Dios está en los cielos; Todo lo que quiso ha hecho.

Esconde tu rostro de mis pecados, Y borra todas mis maldades. No me eches de delante de ti, Y no quites de mí tu santo Espíritu.

Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado;
Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios.

La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella.